Una auténtica lluvia de consultas de la juventud recibió la Junta Nacional de Escrutinio (JNE) en el Encuentro Ciudadano celebrado en la Universidad Interamericana de Panamá (UIP), en un nutrido encuentro organizado con el apoyo de la Unión Nacional de Centros Educativos Particulares (UNCEP).
El encuentro, celebrado en un auditorio de la UIP, reunió a poco más de 250 estudiantes, incluso, una treintena que llegaron desde la ciudad de Las Tablas, quienes siguieron atentamente las explicaciones y conocieron las herramientas que les presentaron los miembros de la JNE.
La comitiva de esta corporación electoral estuvo integrada por su presidenta, Nivia Rossana Castrellón; su segunda suplente, Madeleine Escribano; y la primera suplente de vocal, Daniela Noriega, quienes atendieron con amplitud las consultas de los jóvenes, algunos ya con edad de votar. Muchas de sus inquietudes son un reflejo de las interrogantes que tiene la sociedad panameña.
La labor de los miembros de la JNE es ad honorem; no son funcionarios del Tribunal Electoral. La JNE ofrece información oficial desde su página web https://jnepanama.com con su chatbot CIVI. También desde sus redes sociales promueve la formación del pensamiento crítico como instrumento esencial para el voto informado.
Se alienta el uso de recursos como la Guía del Buen Votante y de la aplicación Verificate.te.gob.pa del Tribunal Electoral, que divulga la hoja de vida y la oferta electoral de cada candidato, además de contar con el correo [email protected] para atender sus consultas con el propósito de ejercer el voto informado y responsable.
Castrellón enfatizó que el trabajo de escrutinio de la Junta es manual, no conectado a internet, sobre cada una de las 39 actas circuitales y una del RERE/REVA (Registro de Electores Residentes en el Extranjero/Registro de Electores del Voto Adelantado). Por eso el conteo de la Junta no es susceptible de manipulación ni ataque cibernético -continuó- y los resultados oficiales de proclamación del nuevo presidente y vicepresidente se darán “después de que se haya contado hasta el último voto”, porque en Panamá la democracia es directa.
A una joven le preocupaba por qué tanta preparación si al final se habla que algunos compran los votos en las mesas. Fue una de las preguntas de los jóvenes, lo que dio pie a explicar el paso a paso del sistema panameño de democracia directa, en la que es muy difícil torcer la voluntad popular habiendo tantos testigos, entre representantes de los candidatos, observadores, jurados de mesa y la población y copias de miles de actas de mesas en manos de múltiples actores que participan en el proceso.
Los chicos querían saber si es posible que se dé un recuento si un candidato lo pide, o si los extranjeros pueden votar y, el repetido mito, de que “si no voto, ese voto se lo dan a otro candidato”.
Otras consultas giraron en torno a los mecanismos de seguridad para el traslado de las actas “sin que sean alteradas” y también qué evita una alteración en el acta del Registro de Electores Residentes en el Extranjero )RERE)/ Registro de Electores de Voto Adelantado (REVA) o ¿cuántas veces una persona puede ser parte de la Junta, hay un límite? Y si es posible que se den discrepancias entre la Transmisión Extraoficial de Resultados (TER) y el conteo oficial de la Junta.
Los jóvenes querían saber cómo y cuándo se escogen a los representantes de los candidatos ante la JNE y qué garantiza que no habrá manipulación durante el conteo de actas para Presidente y Vicepresidente y qué pasa si una persona altera los resultados.
Las preguntas abundaron en medio del interés de los jóvenes y cada una fue contestada de la manera más exhaustiva posible e, incluso, se invitó a la UNCEP para que lleve una delegación de jóvenes a presenciar el escrutinio en la sede de la JNE, en el Parlamento Latinoamericano y Caribeño, a partir que inicia el escrutinio.
El encuentro sirvió para motivar a los jóvenes a participar como testigos en los próximos comicios y llevar el mensaje a sus padres y amistades sobre las dudas que persisten en la población, muchas de ellas producto del desconocimiento, de los pobres contenidos de las ciencias sociales y el resultado de las llamadas “leyendas urbanas” sobre el sistema electoral panameño.
La Junta Nacional de Escrutinio reiteró su promesa de contar “todos los votos” antes de proclamar quién será el próximo presidente de Panamá, su vicepresidente y posteriormente a los 20 diputados al Parlamento Centroamericano (PARLACEN) y enfatizó la importancia de seguir el conteo por transmisión directa 24/7 desde el Parlatino.
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Sobre la Junta Nacional de Escrutinio
La JNE es la corporación electoral transitoria, autónoma e itinerante encargada del conteo de votos para escoger al Presidente y Vicepresidente de Panamá con base en las 39 actas de circuitos electorales y el acta del voto en el exterior y el voto adelantado (RERE/REVA).
Su misión es recibir, custodiar y escrutar todas las actas hasta el último voto, antes de hacer la proclamación del nuevo gobernante del país.
Está integrada por nueve ciudadanos panameños -seis de ellos, mujeres y 55% por ciento de 40 años o menos- escogidos por el Tribunal Electoral. No reciben ninguna remuneración por su labor cívica; no tienen ninguna afiliación política partidista ni con ningún candidato de libre postulación. Son personas de probada buena reputación, correctamente inscritos en el padrón final electoral y sin ninguna condena en el sistema judicial.
Su actual presidenta en la abogada y educadora, Nivia Rossana Castrellón Echeverría, quien, por segunda ocasión consecutiva, fue seleccionada por el Tribunal Electoral para dirigir la magna tarea.
Enlaces de prensa:
Mayteé Zachrisson ([email protected])
Luis Miguel Blanco ([email protected])